
Capítulo 17: Un sueño de mijo amarillo en Shanghai
El vestido de Cenicienta no la hizo instantáneamente glamorosa. Por el contrario, Ji Zhen Tang se sintió particularmente avergonzada mientras reflexionaba sobre cómo organizarlo. Enviarlo a la casa de su tía generaría muchas preguntas; mantenerlo en el dormitorio requeriría esconderlo y ocuparía mucho espacio. No había garantía de que sus compañeras de habitación no lo notaran.
Ese vestido no era un artículo comprado en una tienda común y corriente. La caja de regalo de la marca por sí sola se sentía tan pesada como una pila de ladrillos.
Era un peso que no podía soportar.
La repentina aparición de Xiao Gao hizo que se desconectara de la agitación emocional causada por Zhao Siqi.
Cuando Ji Zhen Tang estaba sola en el dormitorio, se sintió un poco incómoda, su estado de ánimo fluctuaba, insegura de dónde enfocar sus pensamientos.
No se apresuró a desempacar el vestido.
Simplemente no pensó en nada, encendió la televisión y miró algunos programas de variedades por un rato.
Pronto, sus compañeras de cuarto comenzaron a regresar una tras otra.
“Tang Tang, ¿escuché que tuviste una pelea con Zhao Siqi?” – Zhou Zhi abrió la puerta primero.
Ji Zhen Tang suspiró. – “Las noticias viajan rápido. ¿También te enteraste de eso?”
Su Yunli la siguió y preguntó qué sucedió.
Ji Zhen Tang explicó brevemente los detalles.
Su Yunli murmuró. – “¿De verdad recurrió a la violencia? Ese tipo de hombre da demasiado miedo.”
Luego preguntó. – “¿Dónde estás herida? Tengo un spray Yunnan Baiyao*.”
(N/T: *雲南白藥 = Yunnan Bai Yao – La famosa Medicina Blanca de Yunnan. La fórmula herbal y de fitoterapia Yunnan Bai Yao es una de las más famosas y potentes medicinas herbales usadas en China desde hace más de un siglo.)
Después de tomar el medicamento, abrió su abrigo y reveló el área magullada, no lo sabía, pero se sorprendió cuando lo vio. El impacto de la pelota de tenis fue tan fuerte, que le causó un gran hematoma en el hombro izquierdo cerca de la clavícula. Ji Zhen Tang se enojó aún más. – “Parece que no golpeé la pelota lo suficientemente fuerte hoy. ¡Debería haberle aplastado el puente de su nariz y destrozarle los dientes!”
Lin Guixue trató de calmar su espíritu de lucha: “Está bien, está bien, no seas impulsiva.” – Se acercó y le dio unas palmaditas en la cabeza: “Estoy pensando, ¿y si vuelve a causar problemas?”
Zhou Zhi dijo: “¿Es útil decírselo al consejero? Esto es obviamente acoso.”
Su Yunli parecía más tranquila y preguntó: “¿Qué rencor tiene contra ti?”
Ji Zhen Tang dijo: “Es por el asunto de la votación, definitivamente cree que lo denuncié.”
Zhou Zhi preguntó: “¿Denunciar qué?”
“Contrató prostitutas.”
Todas se quedaron en silencio durante unos segundos.
Su Yunli dijo: “Supongo que decírselo al maestro no ayudará mucho. El padre de Zhao Siqi es bastante influyente y mi tía no se atreve a ofender a su familia. Sin mencionar que, incluso en nuestra universidad, puede cubrir el cielo con una sola mano. Después de todo, aquellos que se gradúen de aquí y quieran ingresar a la industria de la joyería tienen que echar un vistazo al negocio de la familia Zhao.”
La tía de Su Yunli era vicepresidenta de un grupo de moda y tenía un estatus considerable en la industria.
“El negocio construido por su familia le permite estar en la cima de la cadena alimentaria. Los líderes de la universidad, si no lo adulan, al menos tienen que ser tolerantes.” (Sun Yunli)
Hubo silencio en el dormitorio de nuevo.
Zhou Zhi continuó aportando ideas: “Entonces, ¿Qué tal si buscamos los medios para exponerlo? En Weibo.”
Ji Zhen Tang interrumpió: “Es mejor no hacer tanto escándalo. Hacer un gran alboroto por esto no me beneficiará.”
Después de pensarlo, se calmó un poco más: “Los soldados lo detendrán, el agua lo cubrirá con tierra, el cielo está despejado y el sol brilla, no creo que pueda matarme*.”
(N/T: *Significado: no creo que pueda acosarme a plena luz del día.)
Zhou Zhi dijo: “Lo que sea que haga la próxima vez, nos lo dices. O puedes grabar un video y publicarlo en Internet, pues sería una prueba irrefutable y así dejar que lo critiquen públicamente.”
Ji Zhen Tang asintió: “Lo sé.”
Y así, ese asunto quedó temporalmente archivado.
El siguiente fin de semana, Ji Zhen Tang luchó por transportar el vestido enviado por Zhong Yu Bai de regreso al Pabellón Luotang en su scooter. Lloviznaba un poco por el camino, lo que aumentó su cansancio. Al descargar la caja de regalo, su primer instinto no fue arreglarse, sino limpiar las gotas de lluvia de la caja, afortunadamente, el envoltorio era resistente y no estaba dañado, a continuación, abrió la caja con cuidado.
Dentro había un vestido llamado ‘la Primavera de Cenicienta.’
Era un vestido de alta costura de la temporada, tan exquisito que ni siquiera podía tomar prestada una sola flor.
La falda de gasa azul profundo y sereno era tan tranquilo como las profundidades del mar, exudando un encanto relajante, sin embargo, la superficie de la falda estaba adornada con manchas de estrellas como luciérnagas, conservando un estilo romántico juvenil. El escote estaba diseñado en estilo halter, lo que eliminaba la necesidad de que ella pensara cómo combinar los accesorios, pero un diseño así ponía al descubierto en gran medida la proporción de su cabeza, cuello y hombros y la suavidad de su estructura ósea.
Sería difícil lograr un efecto perfecto sin el gusto adecuado.
Afortunadamente, mientras se admiraba en el espejo, Ji Zhen Tang sintió cierta modestia y reserva que en cuanto a su figura.
La mejor parte fue que el diseño del vestido ocultaba perfectamente el moretón en su hombro.
De hecho, no era exagerado decir que estaba hecho a medida.
Antes de que su tía llegara a casa, se entregó a admirarse en el espejo durante un rato, lo que dio lugar a pensamientos extraños.
Había pasado mucho tiempo desde que había jugado al juego del cosplay*.
(N/T: * El cosplay, contracción de costume play («interpretar disfrazado»), es una actividad representativa, en la cual los participantes -también llamados cosplayers- usan accesorios y vestimenta que representan un personaje específico.)
“Cuando el reloj marque las doce, debería regresar. Adiós, mi príncipe…”
Ji Zhen Tang miró hacia el espejo en trance, moviendo lentamente sus pasos y cuando estaba a punto de salir: “¡Ups, perdí mi zapatilla de cristal, oh no!”
A continuación, agregó su propia narración: “En este momento, el príncipe encontró la zapatilla de cristal de Cenicienta detrás de él, así que gritó y sus soldados vinieron corriendo.”
Dijo con voz áspera, imitando al príncipe con una mirada determinada en su rostro: “¡Rápido, ve y búsca puerta en puerta y encuentra al dueño de este zapato!”
Antes de que pudiera terminar sus palabras, la voz de Ji Xinhe llegó desde abajo: “¿Eh? ¿Qué zapato perdiste? ¿Lo dejaste afuera para que se seque y alguien lo tomó por error?”
Ji Zhen Tang cerró rápidamente la puerta a la velocidad de un rayo, se quitó el vestido antes de que Ji Xinhe subiera las escaleras y cuando su tía llamó a la puerta, sonrió, se acomodó la camiseta que acababa de ponerse y dijo con calma: “No, solo estoy viendo la televisión.”
Ji Xinhe dijo: “Oh, me asustaste. Pensé que habías ido a tomar el sol en la propiedad de otra persona.”
“No, no, todo está bien.”
Dicho eso, Ji Xinhe echó un vistazo al interior y no encontró nada extraño, así que bajó las escaleras.
Con un suspiro de alivio, Ji Zhen Tang se acostó en la cama.
Abrió su teléfono y descubrió que hacía unos minutos había llegado un mensaje de ‘Frontline.’
Zhou Zhi: [‘Gente, escuché que se ocuparon de Zhao Siqi.’]
Al ver el mensaje en el chat grupal, Ji Zhen Tang respiró hondo y se sentó con urgencia.
Lin Guixue: [‘¿Real o falso? ¿Quién lo hizo?’]
Zhou Zhi: [‘No lo sé, un amigo de la universidad me dijo que alguien contrató a un grupo para que destrozara su tienda, la cual abrió en la calle de bares detrás de Hang Lung, me dijo que aparentemente fue golpeada con fuerza, incluso destrozaron el letrero. La tienda ha estado cerrada durante los últimos dos días.’]
Lin Guixue: [‘¿Eh? ¿Nadie vio quién lo destrozó?’]
Zhou Zhi: [‘Contrataron a matones profesionales, el cerebro detrás de escena no ha aparecido.’]
Lin Guixue: [‘Quien es el filántropo moderno, Lei Feng*.’]
(N/T: *Lei Feng fue un supuesto soldado del Ejército Popular de Liberación de la República Popular China. Muerto en un accidente de trabajo a los 21 años, su figura adquirió dimensión nacional como ejemplo de desprendimiento personal, la moral socialista y la disposición permanente a ayudar a los demás.)
Zhou Zhi: [‘¿Nuestra Tang Tang le pidió a alguien que lo hiciera?’]
Ji Zhen Tang intervino: [‘¿Cómo podría hacer eso?’]
Zhou Zhi: [‘Entonces probablemente ofendió a algún gran jefe, por lo general él grita o bebe, tal vez chocó con un oponente duro esta vez y ahora reirá hasta morir.’]
Zhou Zhi: [‘Me pregunto si Zhao Siqi llorará de ira, es gracioso solo de pensarlo.’]
Unos minutos después, Zhou Zhi envió otro enlace al foro: [«¿El joven maestro de Zhao se ha topado con una pared?»]
Ji Zhen Tang hizo clic para ver, y vio que en la publicación principal había una foto del letrero de la tienda de Zhao Siqi tirado en el suelo.
1L: [‘Oh, Dios, este letrero está hecho pedazos, ¿Cómo de grande es el rencor?’]
2L: [‘No hay muchos que se atrevan a meterse con él de esa manera, probablemente sé quién es.’]
3L: [‘Parece que también lo he adivinado, ¿tienen una disputa?’]
4L: [‘¿Quién es? Esperando.’]
5L: <<Respuesta a 3L>>: [‘¿Está relacionado con una niña?’]
6L: [‘Todo un edificio de acertijos, decir nombres te matará.’]
7L: << Respuesta a 6L>>: [‘Otro joven maestro de la Villa Médica, no menciones nombres aquí o la publicación se eliminará.’]
8L: [‘Si no lo sabes, ¿por qué no preguntas a tu alrededor? ¿cuántas personas se atreverían a meterse con Zhao Siqi?’]
Durante esos pocos minutos de contemplación, Ji Zhen Tang tuvo una vaga idea de quién podría ser.
Los siguientes días transcurrieron sin incidentes, y Zhao Siqi no le hizo nada.
Ella tampoco escuchó muchos rumores relacionados con él.
Unos días después, Ji Zhen Tang terminó su clase, cenó con Su Yunli y luego ambas regresaron juntas al dormitorio. El cielo estaba gris y mohoso, con signos de lluvia, el clima sombrío persistió encapotado todo el día, y justo cuando vio a Zhong Heng, la lluvia finalmente cayó a cántaros, levantando el polvo del suelo.
Cerró su paraguas y se paró en el pasillo del dormitorio de mujeres. Más allá de la multitud bulliciosa que iba y venía, vio a Zhong Heng parado en un rincón. Todavía le gustaba vestir todo de negro, luciendo frío y peligroso.
Sostenía un cigarrillo en la mano y la colilla parpadeaba bajo la lluvia.
Él la miró e hizo contacto visual con ella por un momento.
Ji Zhen Tang miró a Su Yunli y quiso pedirle que se fuera primero, pero vio la expresión miserable de Su Yunli, más fea que el cielo, como si fuera la trágica heroína de una historia de amor.
Ji Zhen Tang parecía demasiado tranquila. Movió los labios, pero finalmente no dijo nada.
Zhong Heng no se acercó, así que ella pasó entre varias personas y se acercó él, confrontándolo como lo hacía habitualmente: “¿Estás aquí para atribuirte el mérito?”
Él se rió entre dientes y la miró: “¿Tienes que especular así sobre mí?”
Ji Zhen Tang dijo: “Acepto tu buena voluntad, pero no significa que lo apruebe o te aconseje que hagas eso.”
Zhong Heng hizo oídos sordos y le preguntó: “¿Dónde estás herida? Déjame ver.”
“En mi hombro. ¿Quieres que me quite la ropa y te lo muestre ahora?”
Él dijo: “¿Puedes dejar de ser tan sarcástica?”
“No, me molesta cuando otros me dicen qué hacer.”
Mientras hablaba, ella miró el leve humo que salía de las puntas de sus dedos y agregó: “La segunda cosa que más me molesta, son los hombres fumando.”
Zhong Heng algo desanimado y apoyándose contra el pilar de la pared, fumó vigorosamente el cigarrillo justo frente a ella.
Como él le había brindado un poco de ayuda, ella dejo de lado su actitud aguda y preguntó. – “¿Qué quieres de mí?”
“Que el espejo roto vuelva a estar completo*.” – Dijo con una postura etérea y enamorada. – “Te estoy esperando.”
(N/T: * 破镜重圆 (pò jìng chóng yuán) es una expresión china que significa “el espejo roto vuelve a estar completo”. Se utiliza como metáfora para referirse a una pareja que se ha separado y luego se ha vuelto a reunir.)
“¿Reconciliación? ¿Te casarás conmigo?” – Preguntó ella directa y bruscamente.
“No puedo.” – Respondió sucinta y llanamente.
La sutil diferencia radicaba solo en el cambio de ‘no quiero’ a ‘no puedo.’
La esencia permaneció inalterada, sigue siendo el mismo Zhong Heng franco y despiadado.
Pero ya no importaba.
Ji Zhen Tang sonrió.
Ella miró a Zhong Heng y dijo palabra por palabra: “Gracias por haberme defendido, no necesitas hacerlo de nuevo en el futuro.”
Y gracias a su amabilidad, finalmente logró contener la frase: ‘pájaros de una misma pluma.’
(N/T: *丘之貉 = también puede traducirse como: un perro mapache de la misma colina o pájaros de una misma pluma. Significado: las personas que son similares entre sí (ya sea que tengan un interés, pasatiempo, creencia o trasfondo común) tienden a asociarse unas con otras. Generalmente tiene un significado negativo.)
Zhong Heng no discutió hoy.
Sus ojos generalmente orgullosos y agudos, cuando la miró en este momento, mostraban una sutil desolación, como si albergaran muchas emociones. ¿Era renuencia? ¿O tal vez, la soledad de finalmente decir adiós? Ella no quería juzgar más, así que se dio la vuelta y caminó hacia el edificio del dormitorios.
Poco después, Zhong Heng apartó la mirada de ella, apagó el cigarrillo y caminó bajo la lluvia.
Un cariñoso cuidador apareció en ese momento y susurró con una voz suave: “Sunbae, está lloviendo mucho afuera, ¿quieres un paraguas…?”
Zhong Heng se dio la vuelta y miró a Su Yunli.
Él levantó la mano y ella pensó que era para sostener el mango del paraguas, así que lo soltó, dejando que él lo tomara.
Sin embargo, al segundo siguiente, el mango del paraguas que no fue atrapado cayó directamente al suelo en pánico.
Zhong Heng agarró su mano.
Las pupilas de Su Yunli se encogieron de repente. – “Tú…”
Antes de que ella tuviera tiempo reaccionar, él la arrastró hacia la lluvia.
El destino era su auto no muy lejos.
Ji Zhen Tang entró al ascensor y solo entonces se dio cuenta de que nadie la seguía. Se asomó, pero el auto de Zhong Heng ya empapado en agua de lluvia, se alejaba rápidamente.
‘En la cima de la cadena alimentaria.’
Esa noche, inexplicablemente pensó en el término que Su Yunli había mencionado.
Ji Zhen Tang sostuvo un bolígrafo y un papel, escuchando la lluvia torrencial afuera, pensando en la tía de Su Yunli, el padre de Zhao Siqi y las acciones de Zhong Heng y mientras pensaba, escribió en un papel borrador:
Su → Zhao → Zhong Heng → Zhong…
Las dos palabras omitidas en los puntos suspensivos al final no necesitaban ser escritas, pero ya tenían un poder abrumador, como si hubieran penetrado el papel, dándole un apoyo inexplicable.
La tinta del bolígrafo se derritió en el último signo de puntuación, y lo miró fijamente durante mucho tiempo.
Luego hizo tres cruces y dibujó apresuradamente tres barras al azar, tachándolas todo sin dejar rastro.
Su Yunli regresó antes de la clase al día siguiente, ya pasada la hora del almuerzo. Entró el salón de clases apresuradamente, encontró el asiento que su compañera de dormitorio le había reservado. Ji Zhen Tang recordó que tenía el cabello atado cuando se fue, pero ahora, su lazo para el cabello estaba enrollado alrededor de su muñeca.
Ji Zhen Tang de repente se sintió bastante aliviada, una sensación de alivio surgió inexplicablemente de su corazón.
La falsa historia de amor finalmente había llegado a su fin.
***
Cuando los días soleados regresaron, había un frescor refrescante en el aire. Los miembros de la Asociación de Vela de Qingcheng estaban practicando en el agua, mientras que Ji Zhen Tang alquiló un pequeño velero sola, tumbada en la superficie del agua cristalina, mirando hacia el cielo. Cuando se recostó y miró al cielo, no pensó en dónde estaba, sintiéndose como si estuviera de nuevo en el mar.
Cuando era pequeña, a menudo se sentaba junto a las olas que fluían de la bahía de Liu Luk en Xingzhou, sosteniendo un coco y bebiéndolo hasta hartarse en los días soleados.
Pensando en eso, Ji Zhen Tang se humedeció los labios con avidez.
Llamó a Zhong Yu Bai y luego cerró los ojos, disfrutando de la luz del sol en sus delgados párpados.
Después de que la otra parte respondió, Ji Zhen Tang se saltó las cortesías y dijo en voz alta: “Transporté a casa la ropa que me envió hace unos días, no se puede imaginar lo avergonzada que me sentí en el camino de regreso, no me parecía en nada a la dueña de ese vestido, parecía la repartidora. Fue una imagen muy cutre.”
Zhong Yu Bai no entendió bien, después de reflexionar por un momento, preguntó con voz profunda, como si estuviera sorprendido: “¿Lo entregaron en tu dormitorio?”
Ella respondió. – “Sí, Xiao Gao.”
Poco después, el hombre se rió entre dientes, suave y tranquilizadoramente. – “Es muy directo, no sabe andarse con rodeos.”
La implicación es que es problemático, así que no discutas con él.
La descripción era interesante y muy comedida. Ji Zhen Tang se rió de eso, sin estar de acuerdo ni en desacuerdo, simplemente tumbada allí, mirando al cielo.
“¿Tienes miedo?” – Preguntó Zhong Yu Bai en voz baja, como si estuviera preocupado por su estado de ánimo.
Ji Zhen Tang dijo: “No, mientras mis compañeros de clase no lo vean, está bien.”
“¿Cuál elegiste?”
“Adivina.”
Zhong Yu Bai apenas si hizo una pausa, no se molestó en “adivinar” y dijo sin pensar: “Él azul.”
Ji Zhen Tang se sentó en estado de shock: “Ya que puede leer las mentes, dese prisa y adivine lo que quiero ahora y encuentra una manera de traérmelo.”
Sus bromas empezaban a sonar a chiste.
A Zhong Yu Bai no le importó, su voz era tranquila y serena y dijo con un atisbo de sonrisa: “En camino, tu zapatilla de cristal.”
Ji Zhen Tang se asustó tanto que se levantó un momento, y luego dio vueltas sin poder hacer nada, queriendo volverse loca, pero sin poder, y luego se sentó abatida, diciendo: “¡¡Cielos!! Zhong Yu Bai, ¡eres realmente aterrador!”
Era la primera vez que lo llamaba por su nombre completo, sin ningún respeto. En ese momento, se perdió toda su armadura, quedando indefensa, no tenía miedo y no tenía ningún deseo. Solo quería llamarlo por su nombre, ese nombre tomado de un poema.
Él sonrió perezosamente, sus intenciones no estaban muy claras mientras preguntaba casualmente: “¿Tienes miedo de mí?”
Después de un momento, ella se calmó y no respondió.
“¿Sabe? Es como si estuviera soñando todos los días.”
Mientras hablaba, Ji Zhen Tang se recostó y comenzó a murmurar para sí misma como si estuviera en un sueño: “Cuando desperté tuve que enfrentarme a innumerables asuntos triviales, peleas interminables, rodeada de todo tipo de hombres que no me gustan, lo que me causa estrés, lo que me dificulta ver el futuro en mis estudios. Pero en mis sueños, usted me dió todo tipo de regalos, eran tan hermosos, por eso supe que no me pertenecían, esa fue la parte que no puedo soportar.”
Zhong Yu Bai escuchó en silencio, percibiendo con atención su señal de depresión, y le preguntó: “¿Qué pasa?”
Ella respondió: “No es nada, solo quería encontrar un lugar para desahogarme un poco.”
Después de un momento de silencio, continuó: “Desearía ser un pájaro, podría volar a noventa mil millas de distancia viendo el vasto mundo y encontrar un lugar al que realmente pertenezco.”
“Desafortunadamente, no lo soy. Estoy atrapada aquí y no puedo ir a ningún lado.” (Ji Zhen Tang)
“No sé cómo mejorar mi vida, ni cómo hacer para que mis sueños se sientan más reales.” (Ji Zhen Tang)
Zhong Yu Bai le dio una respuesta: “Entonces no te despiertes.”
Ji Zhen Tang respondió aturdida: “Mm.”
Luego agregó: “En la sociedad actual, hay demasiadas personas que quieren quejarse, pero muy pocas que están dispuestas a escuchar. Independientemente de cuál sea su propósito, siempre ha sido paciente conmigo, y no importa lo que pienses de mí, aprecio que me escuche. Ahora me siento mucho mejor.”
Podría haber tenido algo que decir, pero del otro lado de la línea llegó la voz solemne y tranquila de un hombre trabajando.
Ji Zhen Tang se sobresaltó y de repente se sintió un poco avergonzada. Parecía que no era la primera vez que lo interrumpía mientras trabajaba. Pero el hecho era que, aunque no estuvieran en la misma onda, se tomaba un poco de tiempo, si quería, para intentar comprender su dolor.
Ella quería disculparse, pero Zhong Yu Bai nunca mencionó que lo había molestado, solo controló su voz y sonrió gentilmente: “No hay nada malo en tener sueños hermosos. Ya que estás en él, disfrútalo felizmente.”
Ji Zhen Tang sonrió levemente: “Está bien.”
Nameless: Chicas nos quedamos aquí.
La verdad había traducido hasta el Cap. 20, pero cuando estaba haciendo la 2da corrección al 18, me di cuenta de que había como un salto en la historia, pase a los raws y me faltaban como 10 hojas del capítulo, me pareció imposible terminar, así que esos 3 los dejaré para la próxima semana y ayer era tarde y me dio pereza subirlos a la web, motivo por lo cual recién los estoy subiendo ahora.
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