Capítulo 46 – Emparejamiento
Yu Lingxi recordó el lecho de hielo de su vida pasada.
Miró a Ning Yin aturdida, con los labios ligeramente entreabiertos, y le hizo una pregunta que había estado dando vueltas en su mente durante mucho tiempo. – “Cuando una persona muere, su alma se desvanece y su cuerpo es enterrado en paz en el suelo. ¿No es por resentimiento hacia una persona que sellarías su cadáver?”
El rostro de Ning Yin mostró una leve mueca de desprecio, comunicando que esa era práctica de los vulgares y mediocres.
“Una persona a la que odio de verdad tiene que estar viva para divertirme mientras es torturada. Si muere antes de poder hacerlo, simplemente debe ser decapitada y su cadáver tirado para alimentar a los perros.”
(N/T: Justo como hizo con Xue Cen… Torturado sin fin.)
Ning Yin pronunció las palabras más despiadadas con el tono más gentil y preguntó sarcásticamente. – “Mantener un cadáver sellado y bloquear su alrededor, ¿no es estúpido?”
Después de reflexionar detenidamente, de hecho, este fue el caso en su vida anterior.
Los ojos de Yu Lingxi se abrieron de par en par. – “Entonces, si congelas a una persona muerta en una habitación secreta, ¿es porque… en realidad eres reacio a dejarla ir?”
Ning Yin tragó delicadamente la carne de la ciruela picante y una capa de esplendor apareció en sus labios y en las comisuras de sus ojos.
Esa mirada en sus ojos claramente le preguntaba. – ‘Si algo te brinda satisfacción, ¿no debería guardarse bajo llave?’
No importa cuán paranoico sea, de hecho, era el estilo de Ning Yin.
Un pensamiento ridículo cruzó por la mente de Yu Lingxi, pero sintió que era poco probable.
Su cuerpo después de la muerte fue efectivamente sellado en una habitación secreta, pero Ning Yin solo vino una vez después de emborracharse y luego selló la habitación secreta, prohibiendo a nadie mencionarla.
No existió tal cosa como encontrarse con ellas todos los días, como acababa de decir.
Lo único que podía confirmar era que Ning Yin no la odiaba, incluso si ella era un recipiente envenenado para asesinarlo.
Yu Lingxi aún no había descubierto de dónde viene las contradicciones en eso.
“¿Tiene miedo?” – Ning Yin se inclinó y una risa suave llegó a sus oídos.
Bajó su mirada y escaneó la expresión compleja de Yu Lingxi, luego extendió la mano para tocar la parte superior de su cabello.
Cubierta por las sombras, las pestañas de Yu Lingxi parpadearon, cerrando los ojos instintivamente.
Ning Yin simplemente tomó un pétalo de glicina morada pegada a su cabello, las yemas de sus dedos frotaron suavemente el pétalo suave, diciendo a la ligera. – “¿Miedo de qué? La persona que puede hacerme pasar por este tipo de problemas aún no ha aparecido.”
Su tono profundo y lento fue bastante significativo.
Yu Lingxi abrió los ojos y miró los ojos oscuros de Ning Yin bañados en luz y dijo con suavidad y firmeza. – “No tengo miedo, Ning Yin.”
Ella dijo su nombre: Ning Yin.
Cuando este nombre salió de su boca, contenía una dulzura y firmeza que parecía abarcar el tiempo y el espacio y cruzar los límites de la vida y la muerte.
Ning Yin la miró durante un largo rato, con un atisbo de sonrisa en sus labios, levantando la mano de nuevo.
Esta vez, su palma larga y poderosa cubrió suavemente su cabello, como si acariciara a un gato.
De vuelta en su habitación, Yu Lingxi se sentó en la cama cubierta con una colcha tejida de jade, mirando el pincel de flor de ciruelo rojo con punta ennegrecida en el porta pinceles sobre el estante.
Después de un largo rato, se tocó suavemente el pecho palpitante. Estaba cálido y dolía un poco.
La luna estaba en lo alto del cielo y la habitación no estaba iluminada.
Ning Yin, estaba recostado en el sofá con su holgada chaqueta china, con la cinta de color blanco albaricoque girando entre sus delgados dedos, brillando de un blanco encantador bajo la sombra de la luz de la luna.
Junto a la cama, el compartimento oculto de un armario bajo estaba abierto de par en par, y en su interior contenía silenciosamente una cometa de papel con un ala remendada y el hilo de longevidad de cinco colores que estaba fuera de temporada.
***
La señora Yu, preocupada por la adaptación de su nueva nuera a la casa, le ordenó a Yu Lingxi que fuera con ella siempre que pudiera para aliviar su aburrimiento.
Incluso si la señora Yu no lo mencionara, Yu Lingxi lo habría hecho.
Después de todo, debido a las experiencias de su vida pasada, Yu Lingxi tenía una excelente impresión de su nueva cuñada. <imreadingabook.com> Además, sus hermanos a menudo estaban ocupados con asuntos oficiales, por lo que era raro para ella encontrar un compañero de su edad con quien hablar en la residencia.
“¿Cómo está?” (Su Guan)
Su Guan, sosteniendo su pequeño moño de ¿recién casada, parpadeó con sus grandes ojos felinos, esperando ansiosamente la reacción de su cuñada.
Yu Lingxi, giró el pastel de frijol rojo hecho por Su Guan y le dio un pequeño mordisco.
La dulzura se extendió por su lengua, lo suficiente como para barrer todas las preocupaciones.
Yu Lingxi asintió y elogió sinceramente. – “¡Delicioso!”
Su Guan sonrió satisfecha y le dio otro trozo de pastel a Yu Lingxi, luego colocó el resto en un recipiente de comida, planeando dárselos a Yu Huanchen para que los probara más tarde.
Al ver la ciruela con chile picante en la taza de Yu Lingxi, Su Guan, curiosa, preguntó en voz baja. – “¿A mi hermana le gustan las cosas ácidas?”
“Es picante.” – Explicó Yu Lingxi.
“¿Puedo probarlo?” – Preguntó Su Guan.
Después de pensar por un momento, Yu Lingxi desató la pequeña bolsa de su cintura, tomó una ciruela picante, la colocó en una tetera, y cuando el sabor se desvaneció, se la entregó a Su Guan.
Su Guan olfateó y tomó un pequeño sorbo con bastante elegancia, parpadeando y cubriéndose los labios con un pañuelo, dijo. – “Es un poco agrio y picante, un sabor muy especial.”
“¿En serio?” – Se rió Yu Lingxi.
Después de intercambiar preferencias, las chicas tendieron a acercarse. Las dos sillas se acercaron cada vez más y, finalmente, se sentaron juntas a conversar.
Cuando Yu Huanchen regresó de la corte, vio a su esposa recién casada y a su hermana menor sentadas uno al lado de la otra en el columpio, leyendo un libro juntas.
Bajo la densa sombra del verano, la luz del sol se esparcía como oro fragmentado. Una era linda y exquisita, la otra encantadora y brillante. El viento hizo que sus chales drapeados revolotearan, creando una imagen vívida de mujeres hermosas.
Yu Huanchen se aclaró la garganta sin mostrar ninguna emoción.
Su Guan inmediatamente levantó la cabeza, se puso de pie y saludó. – “Esposo, ¿has vuelto?”
Yu Huanchen miró a su encantadora esposa, luego rápidamente desvió la mirada y respondió suavemente con un “Hmm.”
“El tiempo es caluroso, y ha estado ocupado con tus deberes oficiales, por lo que debes haber trabajado duro.” (Su Guan)
Su Guan tomó con consideración el té de hierbas frío entregado por un sirviente y se lo entregó con una sonrisa. – “Toma un poco de té, esposo.”
Cuando Yu Huanchen tomó el té, Su Guan sostuvo el pastel de frijoles rojos y dijo. – “Hice este dulce yo misma. Esposo, ¿te gustaría probarlo?”
Ella lo llamó dulcemente ‘esposo’ una vez tras otra, e incluso Yu Huanchen, quien había declarado firmemente que no le gustaban las ‘delicadas damas nobles de tocador’, no pudo evitar sonrojarse, mostrando un toque de dulce vergüenza.
Yu Lingxi se balanceaba en el columpio con un libro cubriéndole la cara, sonriendo con los ojos cerrados.
Mientras sonreía, recordó los hermosos ojos de Ning Yin que estaban seductoramente rojos esa noche y sus palabras que estremecieron su corazón hasta la médula. – <“Incluso si muere, quiero que permanezca a mi lado.”>
¿Podría ser que los sentimientos en el mundo no son todos iguales, sino que existan mil formas diferentes de emociones?
En el calor del verano, estaba somnolienta y pensativa, recientemente, la cantidad de veces que pensaba en Ning Yin y su vida pasada parecía haber aumentado significativamente. Cada vez que llegaba a una nueva conclusión, se sentía abrumada por dudas más profundas.
A medida que se acercaba el mediodía, el sol se volvió cada vez más caliente.
La joven pareja que tenía delante eran recién casados, por lo que Yu Lingxi no quería molestarlos demasiado, así que reunió sus pensamientos errantes, se despidió y regresó a su residencia.
Justo cuando entró al patio, Hutao se apresuró, incapaz de contener su emoción. – “Señorita, tanto la mansión del general Zhongwu como la del Marqués Cheng’an enviaron mensajeros para hacer de casamenteros.”
“¿Casamenteros?” – Preguntó Yu Lingxi. – “¿Para quién?”
“¡Por supuesto, es para usted, señorita! Se dice que, durante la reciente celebración del banquete de bodas del joven general, asistieron todos los hijos de familias aristocráticas de la capital. Al ver la elegancia y extraordinaria belleza de la joven dama, muchos se han movido para proponerle matrimonio. Hoy han venido dos familias.”
Hablando de ese punto, Hutao se sintió feliz y preocupada al mismo tiempo.
Feliz porque la señorita tenía más opciones, preocupada porque temía que la señorita pudiera retrasar una relación correcta.
Después de todo, no importaba cuánto favoreciera la señorita a ese guardia, nunca podría superar la barrera de estatus y linaje familiar. Y en cuanto a Xue Erlang, era evidente para todos que él estaba profundamente enamorado de la joven dama, sin mencionar al general y su esposa, incluso los sirvientes lo notaron.
Yu Lingxi no parecía nada feliz, solo suspiró y secretamente sintió un dolor de cabeza.
‘Esta vez, ¿qué razón debería usar para negarme?’
***
Los días calurosos son la temporada alta para que las tiendas de té de la capital atraigan clientes.
Algunos establecimientos de renombre que atienden a funcionarios de alto rango incluso introdujeron varios sabores de bebidas heladas y queso crujiente de montaña.
El heredero del Marqués Cheng’an agitó suavemente un abanico de papel, sentado frente a su buen amigo. Después de algunas bromas, la conversación naturalmente giró hacia el tema del matrimonio del joven señor.
Uno de ellos dijo. – “Escuché que el joven maestro desea casarse con la hija menor del General Yu. ¡Les extiendo mis felicitaciones por la feliz ocasión!”
El Príncipe de Cheng’an reprimió sus pensamientos mezquinos y fingió ser humilde. – “Es sólo la orden de mis padres, aún no hay una decisión final.”
“Aigoo, el joven maestro está siendo demasiado humilde. El General Yu que comanda un ejército fuerte, no permitirá el compromiso de su hija con el hijo del General Zhongwu, otro general talentoso de una familia militar y será cauteloso en volverse demasiado poderoso por su propio bien para así evitar los celos Emperador. En cuanto al Segundo Joven Maestro Xue, se dice que ha estado comprometido durante mucho tiempo de la dama mayor de la familia Yu. Cuando se trata de compromisos, la familia Xue es conocida por su moderación y apego a la etiqueta, y no romperán fácilmente un compromiso… Por lo tanto, parece que solo queda el joven maestro.” (Amigo)
Otra persona, usando un abanico plegable para tocar el hombro del heredero del Marqués Cheng’an, dijo con una sonrisa. – “Además, el Príncipe Zhilan Yushu es especialmente talentoso en pintura y es comparable con el segundo joven maestro Xue, así que ¿a qué mujer en el mundo no le gustaría?”
De hecho, el heredero del Marqués Cheng’an así lo pensó.
Aunque tenía el estatus de heredero del Marqués, la residencia del Marqués Cheng’an había decaído a lo largo de varias generaciones y no tiene poder real, por lo que es el candidato más adecuado para casarse con la Familia Yu.
Sin embargo, estaba genuinamente disgustado. Lo que más resiente en su vida es ser comparado con Xue Erlang.
(N/T: 二郎 = Erlang = Segundo Joven Maestro. Yo pensando que era como un apodo…)
Después de practicar veinte años pintura, todo lo que pudo escuchar fue ‘comparable con el Segundo Joven Maestro Xue.’
‘¿Quién es Xue Erlang para ser digno de ser el referente de todos los hombres en el mundo?’
El hombre de antes pareció haber notado su disgusto y dijo con una sonrisa. – “Solo el Príncipe quien tiene esa oportunidad. ¡Nosotros, siendo jóvenes, nos casamos temprano y no tenemos ninguna posibilidad de pelear!”
El heredero del Marqués Cheng’an se sintió un poco mejor.
Los hombres talentosos son apasionados y a menudo aman la belleza. La Segunda señorita Yu es reconocida como la mujer más hermosa de toda la capital, ¿por qué no hacerlo?
Justo cuando estaba pensando en ello, de repente escuchó pasos ligeros y desordenados detrás de la mampara divisoria y luego una mujer bellamente vestida se lanzó hacia él, y cayó apresuradamente en los brazos del heredero del Marqués Cheng’an.
Detrás de ella, dos hombres de mirada feroz la perseguían.
La taza de té en la mano del Joven Maestro se volcó, mojando su prenda inferior. No pudo evitar fruncir el ceño. – “Señorita, usted…”
“¡Señor, sálveme!” – La mujer levantó su cara llorosa, tenía la horquilla suelta y respiraba levemente, mostrando una apariencia débil y delicada.
Olía muy fragante, y el heredero del Marqués Cheng’an quedó atónito por el olor e involuntariamente se inclinó más cerca de su cuello.
“Señor…” (Señorita)
Solo cuando la voz tímida sonó suavemente, volvió a sus sentidos, murmurando. – “Señorita, ¿qué dijo hace un momento?”
“Esta humilde muchacha vino sola a la capital para encontrar a sus parientes, pero fue engañada y vendida a un burdel. ¡Por favor, señor, sálvame!” (Señorita)
La mujer extendió la mano y tiró suavemente de la manga del joven, con sus encantadores ojos manchados de lágrimas y pareciendo lastimera.
Los hombres a menudo tienen complejos de héroe, especialmente aquellos que son apasionados.
La dulce fragancia se desvaneció y el heredero del Marqués Cheng’an cambió de mano para rodear la cintura de la mujer, protegiéndola detrás de él, y les dijo a los dos rufianes. – “¿Por cuánto la vendieron? Este Príncipe la comprará de vuelta.”
Los dos amigos no tuvieron tiempo de persuadirlo e intercambiaron miradas.
Por la noche, llegó la hora de cerrar.
Un joven vestido de negro estaba sentado en la barandilla de la habitación privada, jugando con una taza de té y mirando desde la ventana un un lugar determinado en la calle fuera de la casa de té.
Bajo las tenues luces del frente de la casa de té, la mujer que hace unos días había sido rescatada por el heredero del Marqués Cheng’an estaba bastante nerviosa y si se observaba con atención, en su porte y ademanes se podía ver algo de la actitudes lujuriosas.
Ella susurró algo, y un hombre escondido en las sombras arrojó una pesada bolsa de dinero y una pequeña botella.
La mujer lo recibió apresuradamente, le agradeció efusivamente y se fue.
(N/T: Alguien duda que la dama haya sido enviada por el lunático y encima creo que le dio un frasco de ‘Fragancia de la dicha definitiva’.)
***
En estos pocos días, Ning Yin ha estado inusualmente callado, sin aparecer frente a ella durante varios días.
Yu Lingxi recordó su feroz reacción por la propuesta de matrimonio de Xue Cen y ahora, al verlo en silencio, una leve sensación de culpa e inquietud brotó dentro de ella.
Justo cuando estaba pensando en una forma de rechazar las propuestas de matrimonio, Hutao, que fue a preguntar sobre la situación dijo que tanto el hijo mayor del general Zhongwu y como el heredero del Marqués Cheng’an habían cancelado sus propuestas de matrimonio.
“Hutao, ¿qué pasó?” – Preguntó Yu Lingxi.
“El hijo mayor del general Zhongwu se rompió la pierna el segundo día después de proponerle matrimonio, se dice que una adivina afirmó que él y la señorita Yu tienen destinos incompatibles y que, si se casan, él encontrará con un final trágico en una tierra lejana. ¡El joven maestro Zhongwu se asustó y regresó a casa, declarando en voz alta que no volvería a discutir sobre el tema del matrimonio!” (Hutao)
La cara de Hutao se puso roja de ira de ira mientras continuaba gesticulando. – “¡También está ese joven maestro del Marqués Cheng’an y cada vez que hablo de él me pongo tan furiosa! Tiene una cortesana que es tan encantadora como un zorro y está completamente obsesionado con ella, está decidido a llevarla a mansión y casarla con la familia para mantenerla con él para siempre, lo que enfureció al Marqués Cheng’an que ni siquiera tuvo cara para proponerle matrimonio a la señorita. ¡Se comportan como perros todos altivos y poderosos afuera, pero su moral personal es tan despreciable!” (Hutao)
Entre los posibles prospectos con los que se espera que se case, solo Xue Erlang permaneció virtuoso y honesto, manteniendo su corazón como al principio.
Hutao estaba indignada, pero Yu Lingxi se sorprendió por un momento antes de estallar en carcajadas.
“Señorita.” (Hutao)
Preguntó Hutao, desconcertada. – “¿Por qué se ríe?”
El cielo cumplió sus deseos uno por uno, por supuesto Yu Lingxi tiene que reír.
Divertida, explicó. – “Es solo que sus situaciones son tan coincidentes.”
El hijo mayor de Zhongwu, un general militar, teme morir en batalla, por lo que la adivina trató de persuadirlo diciéndole que su vida y destino estaba en conflicto con ella. Y el Príncipe del Marquesado Cheng’an, un hombre talentoso y apasionado, de repente quedó fascinado por una mujer.
Era como si alguien se hubiera dado cuenta de sus debilidades, la coincidencia era demasiada.
Pero esto estaba bien. Esas personas retrocedieron por su cuenta por lo que no necesitaría desperdiciar sus palabras para rechazarlos.
Estaba de muy buen humor, que hasta el cielo pareció iluminarse junto con su estado de ánimo.
Hutao, todavía resentida por los problemáticos asuntos matrimoniales de su Maestra, dijo. – “Por cierto, señorita, la Princesa Qingping de la mansión Tang envió un mensaje invitándola a realizar un recorrido nocturno para ver las linternas durante el Festival Qiqiao.”
Después de que ella se lo recordó, Yu Lingxi se dio cuenta de que el Festival Qiqiao* se acercaba en medio mes.
(N/T: *便是七夕 = Dia del San Valentín Chino.)
Yu Lingxi recordó que, en su vida anterior, durante este Festival de Qiqiao, su tío quería llevarla a un banquete para ganarse el favor de los familiares del Emperador.
Esa fue la primera vez que vio el verdadero rostro debajo de la máscara hipócrita de su tío, y se sintió tan conmocionada y enfadada que cayó gravemente enferma.
Más tarde, después de recuperarse de su enfermedad y que cayeran todas las hojas muertas en el patio, se enteró de que todos los parientes con los que su tío quería ganarse el favor habían muerto, y se había producido un gran cambio de sangre en la corte imperial, con el nombre de Ning Yin surgiendo de la noche a la mañana, conmocionando al mundo entero.
Yu Lingxi no conocía los detalles de lo que sucedió durante esos pocos meses. Todo quedó limpio y todos guardaron silencio.
En el presente, solo sabía que, si el plan de Ning Yin sale bien, probablemente abandonaría la Mansión Yu en poco tiempo.
Curiosamente, ese era el final que conocía desde el principio, pero de repente, cuando pensó en ello hoy, sintió que no estaba preparada.
***
El viento azotó la superficie del Pabellón Junto al Agua, creando ondas que duraron mucho tiempo.
En verano, había muchas frutas y, a menudo, los agricultores llevaban uvas, melones dulces y otros productos que no podían terminar de comer y los venden en las calles.
La gente de la calle aprovechaba la situación y vendía uvas en lugar de caramelos.
Cuando Ning Yin regresó, trajo un racimo de uvas en la mano, las limpió, las peló y las comió tranquilamente.
Al ver a Yu Lingxi sentada sola, perdida en sus pensamientos en el Pabellón de Agua, hizo una pausa y caminó lentamente hacia ella.
Su humor no era muy bueno esos días, con demasiadas abejas y mariposas a su alrededor que era imposible deshacerse de todas, además, había un tonto ignorante llamado Xue Cen, esperando con la boca abierta que su pequeña señorita cayera en sus brazos.
Solo pensar en ello le daba náuseas.
Ahora se está comportando bien y no disfruta matando gente.
De lo contrario, esas pocas personas habrían sido cortadas en pedazos y convertidas en fertilizante para flores.
Sintiendo una sensación de frescor en su rostro, Yu Lingxi de repente se dio la vuelta, solo para encontrarse con los ojos profundos y hermosos de Ning Yin.
Sobre su rostro había un racimo de uvas de piel morada, todavía con gotas de rocío.
“Ning… Wei Qi, ¿qué has estado haciendo estos días?” (Yu Lingxi)
Los ojos de Yu Lingxi se iluminaron y luego se dispersó suaves ondas de luz. – “¿De dónde vinieron las uvas?”
Sin saber en lo que estaba pensando, estaba tan aturdida que casi grita su verdadero nombre.
Ning Yin tomó una uva, la peló con cuidado y le metió la pulpa en la boca, humedeciendo sus labios con el jugo que tenía en la mano.
Presionando suavemente sus labios con las yemas de los dedos, se retiró con indiferencia, dejando atrás un rastro húmedo y fresco.
Yu Lingxi se quedó atónita por un momento, luego frunció el ceño debido a la estimulación del jugo que llenaba su boca.
‘¿Dónde encontró uvas tan agrias?’ (Yu Lingxi)
“¿Están agrias?” – Preguntó Ning Yin.
Yu Lingxi asintió apresuradamente, encontrándola tan agria que se estremeció.
Ning Yin sonrió, asintió y dijo. – “Bien, ácida es lo correcto.”
Usando la mano que acababa de tocar sus labios, tomó otra uva y se la puso en la boca, comiéndola sin cambiar su expresión.
Después de observarlo por un rato, Yu Lingxi, como si hubiera tomado una decisión, levantó la barbilla y preguntó. – “Wei Qi, ¿hay algo que quieras?”
Habiendo estado juntos durante tanto tiempo, parecía que ella no había preguntado seriamente sobre las necesidades de Ning Yin.
Como él finalmente se irá en el futuro, ella quería dejarle algo para recordarla.
Ning Yin la miró, tragando tranquilamente las uvas.
Como si estuviera saboreando una comida deliciosa, se rió entre dientes y preguntó. – “¿Algo que quiera?”
Nameless: Estoy de regreso… He estado avanzando en este periodo de Hiatus, aunque no demasiado. Les cuento que no he buscado una nueva novela para traducir, creo que voy a esperar a terminar alguna de las que llevo actualmente, ya no quiero estar estresada llevando 5 novelas a la par. Solo quiero llevar máximo 2. A menos que encuentre una fácil de traducir… Jaja…
Disfruten estos 5 capítulos… Muchos besos.
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