Episodio 20 – La Catástrofe Negra y la Emperatriz
Las cejas de Lionel se fruncieron. Rápidamente miró a su alrededor para asegurarse de que nadie había seguido a la Emperatriz. Pero sorprendentemente, la Emperatriz estaba sola sin escolta.
Como no llevaba vestido, la mayoría de los caballeros ni siquiera parecían darse cuenta de que ella era la Emperatriz.
La Emperatriz no respondió a la llamada de Lionel, pero levantó la cabeza y miró la torre que descendía con una expresión fría.
“¡Es peligroso! ¡Regrese! ¡Señor Leppat!” (Lionel)
Desesperado, Lionel bloqueó el viento tanto como pudo, como si estuviera cubriendo su delicado cuerpo, y llamó a su ayudante antes de escuchar la respuesta de la Emperatriz. Casi tuvo que gritar por el áspero ruido del viento.
“¡Sí!” (Sr. Leppat)
“¡Tome a Su Majestad ahora mismo y trasládela a un lugar seguro!” (Lionel)
Fue más o menos cuando Sir Leppat, que había entrecerrado los ojos ante el viento que soplaba, asintió y se acercó a la Emperatriz.
“¿Por qué no hay magos? La torre se está acerca demasiado, ¿Por qué no la destruyes? ¿Están acaso esperando que toque el suelo?”
La Emperatriz frunció el ceño y le preguntó a Lionel. Pero Lionel no tuvo tiempo de responder a esa pregunta.
“¡Muévase rápido, Su Majestad! ¡Es peligroso!” (Lionel)
El peligro aquí no era solo la torre… Como era de esperar, los fragmentos de vidrio del largo del antebrazo de un adulto volaron más rápido que las flechas. Si la Emperatriz, que ni siquiera llevaba armadura, hubiera sido alcanzada por esa metralla, su cuerpo habría sido cortado.
‘¡Por qué diablos saltó a este infierno sin escapar!’ (Lionel)
El mero pensamiento de que podría haber una pequeña cicatriz en ese delicado cuerpo lo hizo jadear. Lionel dio un paso atrás y levantó su espada, cubriendo completamente el cuerpo de la Emperatriz.
Fue en ese momento cuando los fragmentos de vidrio volaron a una velocidad aterradora y estuvieron a punto de chocar con su espada.
“¡…!” (Lionel)
Los fragmentos de vidrio volaron con un sonido espeluznante y chocaron con algo transparente, siendo empujados suavemente y luego arrastrados por el viento.
“¿Maná?” (Lionel)
Lionel pensó que los magos finalmente habían llegado. Lord Leppat miró a su alrededor y buscó a los magos, como si pensara lo mismo.
“¿Vienen recién ahora? ¿A esa velocidad?” (Adele)
‘Los magos están viniendo. ¿Pero ese poder mágico de antes era realmente suyo?’ (Lionel)
En primer lugar, la distancia era muy grande y no había señales de urgencia como había dicho la Emperatriz. Lionel se volvió y miró a la Emperatriz. En lugar de dar un paso atrás, se movió hacia la torre y soltó palabras sin sentido.
“Es el nivel 4, y está cerca del nivel 5, por lo que no hay razón para esperar.”
Y antes de que Lionel pudiera decir algo, sacó la espada detrás de ella.
Una Emperatriz esbelta y una larga y afilada espada. Era una combinación poco probable, pero la espada negra larga y delgada que sacó coincidía terriblemente con el dueño.
Todos los caballeros de la guardia imperial miraban a la Emperatriz con gran expectación.
“Su Majestad la Emperatriz, ¿qué estás tratando de hacer?” (Lionel)
Lionel, quien se acercó a ella con urgencia y le preguntó, recibió la respuesta con voz claramente fría de la Emperatriz.
“Eliminar la torre.”
Y tan pronto como se pronunció esas palabras, la Emperatriz se agachó y comenzó a correr como una pantera negra hacia el estruendoso trueno y los relámpagos, hacía la calamidad negra que caía sobre el cielo rojo.
“¡Comandante!” (Sir. Leppat)
Al mismo tiempo que Sir Leppat llamó sorprendido a Lionel, Lionel siguió de cerca a la Emperatriz. Cuando el cuerpo de la Emperatriz estaba a punto de ser levantado por la corriente ascendente, Lionel la agarró rápidamente por el hombro.
Ante la interrupción inesperada, Adele chasqueó la lengua y apartó su mano usando poder mágico.
“No te preocupes. Simplemente no me interrumpas.”
Mientras era empujado hacia atrás por el poder mágico, la Emperatriz arrojó todo su cuerpo hacia la torre sin dudarlo. Y sin un momento para detenerse, giró fuertemente su pie derecho y puso su cuerpo en la corriente ascendente.
“¡No!” (Lionel)
“¡Su Majestad la Emperatriz!” (Lionel)
Los caballeros miraron al cielo con asombro ante la impactante escena que estaban presenciando por primera vez, y gritos mezclados con sorpresa brotaron de todo el lugar.
Incluso Lionel quedó atónito y miró fijamente al cielo… La Emperatriz Adelaide voló hacia el cielo infinito. Sin embargo, Lionel recuperó la razón más rápido que nadie.
Lionel recordó la sensación del poder mágico alejándolo. No podía escuchar con claridad debido al ruido del viento, pero definitivamente le dijo que no la molestara.
Lionel tomó una decisión rápida. – “¡Prepárense para la caída de Su Majestad!”
A la orden de Lionel, todos los caballeros miraron hacia el cielo y se prepararon para atrapar a la Emperatriz si caía.
Los magos que llegaron tarde también estaban ocupados mirando hacia el cielo, hipnotizados por esa visión absurda.
“¿Su Majestad fue arrastrada por la corriente ascendente?” – Lennox Poitier frunció el ceño con asombro y ordenó a sus magos.
“¡Hagan un círculo alrededor de la torre!” (Lennox)
“¡Magos, extiendan su maná y atrapen todo lo que caiga del cielo! Si Su Majestad la Emperatriz cae, recójanla de manera segura. ¿Lo entienden?” (Lennox)
“¡Sí!”
A la orden de Lennox Poitier, los Keepers vestidos con túnicas negras se reunieron alrededor de la torre en perfecto orden y formaron un círculo.
En ese momento los caballeros y magos levantaron la cabeza hacia el cielo con ojos ansiosos.
“¡…!”
Al principio, solo se podía observar una neblina.
“¡…!”
Sin embargo, cuando se dieron cuenta, pudieron identificar que era el borde de un remolino de fuego y el fuego ya se había extendido terriblemente por toda la torre.
“¡Sube a la cima!” (Soldado)
Un rubor caliente se deslizó en sus rostros. Los caballeros y magos se retiraron involuntariamente paso a paso debido al calor como si el sol hubiera descendido.
La torre ahora parecía una enorme columna de fuego. Ardía con tanta fuerza que resplandecía cegándolos.
“¡Su Majestad la Emperatriz!”
“¡Intenten extinguir las llamas de alguna manera con magia!” (Lennox)
Los magos intentaron contener las llamas de alguna manera, pero todo fue en vano. Esa llama se extinguirá solo después de que haya quemado todo lo que tenía que quemar.
“Comandante, ¿qué debemos hacer?” (Soldado)
Mientras todos estaban confundidos y atónitos por la Emperatriz y la aterradora columna de fuego, solo Lionel permaneció en calma. Volvió a mirar la columna de fuego con una expresión tranquila y calmada y miró a la Emperatriz varias veces.
“¡Comandante!”
“Esperen.” (Lionel)
“… ¿Qué?”
“Esperen.” (Lionel)
‘La ropa de entrenamiento que se ajustaba a su cuerpo, la espada atada a su espalda con un cinturón y el fuerte poder mágico que lo empujó lejos.’
Los ojos de Lionel se entrecerraron.
<“¿Las torres con monstruos voladores están clasificadas como intermedias en Ehmont?”> – En la sala de espera de la Sala Central de Conferencias, la Emperatriz había hecho esa pregunta.
Lord Leppat miró fijamente la columna de fuego, atónito. Incluso Lionel le dijo que esperara, así que no tuvo elección.
Y después de un tiempo,
La llama blanca que parecía arder sin cesar de repente comenzó a desvanecerse. Todos los caballeros y magos reunidos en el jardín de rosas observaron la escena con asombro. Cuando el borde del cielo ensangrentado comenzó a ponerse rosa pálido, Lionel, que miraba las llamas blancas, captó algo.
Hasta ahora, se había mantenido firme en su lugar, pero en ese momento comenzó a correr hacia el centro de la torre con todas sus fuerzas. Luego, abrió los brazos hacia la Emperatriz que caía rápidamente.
****
Adele caía sin parar con todo el cuerpo tenso, mientras veía el cielo que se volvía azul poco a poco.
Cuando ella destruye una torre y cae, el cielo retrocediendo en un instante era un espectáculo que solo ella conoce.
‘¿Y si me muere? – Un subordinado que preguntó: – ‘¿No sabe cuándo estará cerca del fondo?’
Adele respondió: ‘No estropees mi pasatiempo’.
Era fácil reducir la velocidad en el último momento y aterrizar en el suelo porque el maná incluso se amplifica con un poco de ayuda de la torre. Incluso si es aterrador para los espectadores.
‘Ahora, ¿hacemos un buen aterrizaje?’ – Adele, que se dio la vuelta y miró al suelo, se sobresaltó. Fue porque un hombre la miraba desesperadamente con los brazos abiertos y sin miedo.
El hermoso rostro con la voluntad de atraparla estaba cada vez más cerca. Adele rápidamente usó magia para levantar todo su cuerpo. Lionel, que estaba abriendo los brazos, los bajó lentamente cuando la caída de la Emperatriz se desaceleró considerablemente.
Las llamas que parecían halos se rompieron y desaparecieron como si estuvieran bailando en el cielo, mientras que el cielo rojo sangre se desvanecía y se volvía rosa.
La Emperatriz descendía lentamente al suelo, como si descendiera con el cielo rosado pálido y el halo de luz detrás de ella.
Lionel y Adele se miraron.
La Emperatriz fría y pálida pisó suavemente el suelo. Al mismo tiempo, la torre desapareció con una última llama y el borde del cielo comenzó a volverse azul. En este momento, cuando incluso el viento se detuvo, la calma llegó al Jardín de las Rosas en ruinas.
Adele, que llamó la atención de todos, inclinó la cabeza hacia Lionel. El cabello suelto caía a un lado como una cascada negra.
“¿Estaba tratando de atraparme con sus brazos?”
“Lo hacía.” (Lionel)
“Un caballero que usa una espada. Si hubiera hecho eso, sus brazos no habría estado libres.’
Adele miró tontamente los anchos hombros que habían abierto sus brazos hacia ella, luego desvió la mirada, sin pensar lo más mínimo en lo que podría pasar con sus brazos.
A pesar de que había gente que la regañaba por sus caídas, nunca nadie vino corriendo a atraparla.
Adele pasó junto a él y susurró con una voz teñida de risa. – “De todos modos, el favor es apreciado. Además, de lo que pasó ayer.”
Lionel, quien de repente recobró el sentido ante esas palabras, miró la espalda de la Emperatriz, que ya se estaba alejando.
‘¿No fue ella la persona que escapó anoche con una cara de aturdimiento? ¿Cómo pudiste reírte así en el lapso de un solo día?’ (Lionel)
El toque de sus esbeltos hombros aún era vívido en su palma. Lionel miró la espalda de Adele y ahuecó sus manos, que ardían tanto como la noche anterior.
No era el único que no podía apartar los ojos de la Emperatriz. La gente la miraba fijamente, sin siquiera pensar en mencionar el nombre de la Emperatriz que destruyó la torre de una manera inaudita.
Adele dio unos pasos y miró a Lennox Poitier, que estaba de pie a un lado, mirando a Adele con una expresión rígida, mientras sostenía una espada que parecía un amplificador en la mano.
Adele pasó junto a él y escupió una palabra.
“La espada, ponla en su funda. No parece necesario.”
Lennox parpadeó y luego volvió lentamente la cabeza para mirar a la Emperatriz, que se alejaba. Y después de un instante…
“Su Majestad la Emperatriz… ¿Derribó la torre sola?” – La pregunta de alguien resonó huecamente dentro del Jardín de las Rosas en ruinas.
Nameless: Me había propuesto traerles 10 capítulos y lo he conseguido, así que espero que este bien corregido, porque no voy a hacer 2da revisión, los capítulos son bien largos…
Para las que quieran saber, el episodio 20 de la novela corresponde al capítulo 17 del manghwa y hasta hoy han publicado hasta el 25. Recién acabo de leerlos y ¡¡Dios!! Esta re-emocionante… Mi corazoncito tiembla…
Chicos, les cuento que quiero traducir también “Traición a la Dignidad” …Es que la cara del Duque Damien Von Thisse en el Manghwa me fascina… ¡Mi gusto culposo! Jaja… Ya traduje el primer capítulo y no se si colgarlo, pero no tengo tiempo de traducir, primero tengo que acabar “Un cuento de Hadas para Villanos”, así que si lo hago solo voy a poder traducir 1 capítulo por semana creo… Deséenme suerte.
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