Capítulo 1: Insulsa y nada destacable*, nada especial
(N/T: *索然寡味” (sòrán guǎwèi) es un refrán chino que significa “apariencia simple y sin sabor.” Se utiliza para describir algo que es aburrido, insípido, o que carece de interés o atractivo. Literalmente, “索” significa “simple” o “sin adornos.” “然” es un adverbio que refuerza esa simplicidad.)
El día de la ceremonia de mayoría de edad de Jiang Se, hubo una tormenta.
Los truenos retumbaron y una lluvia torrencial caía del tejado de la vieja mansión de la familia Cen, formando cortinas de agua en cascada.
Siempre le habían disgustado las tormentas.
El mal tiempo despertó la inquietud que llevaba en lo más profundo de su ser, amenazando con desatarse.
Por supuesto, la lluvia incesante fue solo la mecha. Lo que realmente la inquietaba fue el repentino e inesperado compromiso de la infancia entre ella y Fu Jun.
Dos días antes, la señora Ji había visitado su habitación y le había dicho: “El año en que naciste, el viejo maestro Fu llegó a un acuerdo verbal con tu abuelo para acordar el matrimonio entre tú y Fu Jun. El mes pasado, la familia Fu sacó a relucir esa vieja historia, y tu padre ya ha dado su aprobación ý acordó con la familia Fu que ambas familias celebrarán el banquete de compromiso en cuanto te gradúes de la universidad. Este brazalete de jade de la familia Fu llegó el mes pasado; recuerda usarlo la noche de tu ceremonia de mayoría de edad.”
Cuando Ji Yunyi ha le dijo eso a Jiang Se, su mirada no era ni cálida ni fría, y su tono no era ni ligero ni indiferente, como si hablara de un asunto trivial; ciertamente no del matrimonio para toda la vida de su hija.
Jiang Se ya se había acostumbrado hacía tiempo a la indiferencia de Ji Yunyi.
Mirando a su madre, la Sra. Ji, preguntó con el mismo tono distante: “¿Y si ya tengo a alguien que me gusta?”>
Ni un atisbo de emoción cruzó el rostro exquisitamente maquillado de Ji Yunyi.
Los forasteros siempre elogiaban a Jiang Se por su dulzura y elegancia, diciendo que se parecía a su madre de joven, pues nunca hacía nada inapropiado en el momento menos oportuno.
Pero nadie conocía a esa hija mejor que su madre.
Ji Yunyi era muy consciente de la naturaleza rebelde que se escondía tras la apariencia refinada y dulce de Jiang Se.
Ji Yunyi tomó lentamente un sorbo de té y sonriendo, preguntó: “Se Se, ¿crees que me casé con tu padre porque lo amaba? En familias como las nuestras, el matrimonio no es más que una hoja de parra para esconder la vergüenza, una tapadera conveniente. Con esa hoja de parra puedes disfrutar de una vida de gran libertad, incluso disfrutar de muchas aventuras amorosas. ¿No lo has entendido hace mucho tiempo? Por supuesto, puedes negarte a aceptar esa hoja de parra que tu padre y yo hemos elegido cuidadosamente para ti, siempre que…”
“Casarse con la persona que te gusta pueda traer mayores beneficios que casarte con Fu Jun. Si ese es el caso, tu padre y yo con gusto te permitiríamos romper el compromiso. Pero la verdadera pregunta es: ¿A la persona que te gusta también le gustas?”
‘¿A la persona que te gusta también le gustas?’
Esas palabras resonaron en la mente de Jiang Se durante dos días enteros.
Apartando la mirada de la ventana empapada por la lluvia, se miró en el espejo del tocador que tenía delante.
El espejo reflejaba la lluvia fuera de la ventana; la niebla difusa enmarcaba un rostro delicado y finamente esculpido.
Entendía perfectamente que el futuro proyecto de colaboración entre las familias Fu y Cen era crucial para la entrada de la familia Cen en el nuevo sector energético.
Pero en todo Beicheng*, la familia Fu no era la única fuerza dominante en el campo de la nueva energía, también se encuentra la familia Lu, que posee un imperio comercial aún más extenso que el de la familia Lu.
(N/T: Beicheng» (北城) en chino significa «ciudad del norte.” «Beicheng» es un topónimo que se utiliza en diferentes lugares de China para referirse a la zona norte de una ciudad.)
Y la persona en la que había puesto sus miras no era otro que el nieto predilecto del patriarca de la familia Lu.
Si el matrimonio no era más que hoja de parra conveniente para gente como ellos, ¿por qué no podía elegir el suyo ella misma?
Mirando el antiguo reloj de pared, Jiang Se se levantó y salió de su habitación.
La señora Zhang, que vigilaba la puerta, la vio salir y se apresuró a decirle: “Quedan menos de tres horas para que empiece el banquete. ¿Por qué no descansa un poco más? El vestido que se pondrá esta noche ya está en camino y, una vez que se lo ponga, no tendrá tiempo para descansar.”
La señora Zhang era la ama de llaves encargada de cuidar a Jiang Se. Había estado a su lado desde su nacimiento, lo que la convertía en una de las pocas personas cercanas a Jiang Se en la familia Cen.
Los ojos almendrados de Jiang Se se curvaron ligeramente al sonreír y dijo: “Subo a decirle unas palabras a mi hermano y vuelvo enseguida.”
La señora Zhang supuso que Jiang Se estaba nerviosa por su inminente ceremonia de mayoría de edad y simplemente quería hablar con el joven amo para aliviar su estrés, así que dijo sonriendo: “El joven amo está en el estudio, vaya rápido.”
Cen Li sí estaba efectivamente en el estudio, pero no estaba solo en ese momento, la señora Zhang recordó de repente, solo después de que Jiang Se ya se había marchado, recordó que el joven amo de la familia Lu también estaba en el estudio.
***
La vieja mansión era un edificio de cuatro plantas, y el estudio estaba en el último piso. En su interior, albergaba una colección de numerosas caligrafías y pinturas antiguas, raras y valiosas. Aparte de algunos miembros de la familia Cen, solo se permitía la entrada a los invitados de honor y a la anciana ama de llaves.
El pasillo, que conducía al estudio estaba cubierto por una gruesa alfombra insonorizante, estaba sumido en la oscuridad y el único rayo de luz provenía de la rendija bajo la puerta del estudio.
La puerta estaba entreabierta.
Jiang Se llegó en un momento inoportuno.
O quizás, en un momento oportuno.
Justo cuando estaba a punto de llegar a la puerta, antes de siquiera poder llamar, una voz familiar se escuchó desde el interior.
“Cen Li, deja de intentar aprovecharte de mí.”
El tono del hombre tenía un matiz de indiferencia, y se oyó un leve ‘clic’ de abrir y cerrar el encendedor, como si jugara con él por aburrimiento mientras hablaba.
Su voz era mucho más grave que la de la mayoría de los hombres comunes, profunda y magnética, llena de un encanto inconfundible. Era incluso más rica y hermosa que el tono del violonchelo de Jiang Se.
Esa voz le resultaba muy familiar.
Durante los últimos dos años, cada vez que la oía, su corazón se descontrolaba. Incluso si ocasionalmente escuchaba las tres sílabas de su nombre ‘Lu Huaiyan’ de boca de otra persona, su corazón daba un vuelco.
(N/T: Lu Huaiyan = 陸懷硯. Su nombre en Chino tiene 3 sílabas.)
Era como si le hubieran instalado un interruptor en el pecho, y cualquier cosa relacionada con él pudiera activarlo.
Su nombre, su voz, una mirada fugaz en su dirección e incluso el tenue aroma de su aliento arrastrado por el viento.
Todos eran interruptores.
Y en el momento en que se activaba ese interruptor, se desataba el caos.
Fue precisamente ese fugaz momento de caos lo que la hizo retrasarse un paso. Su mano levantada, justo un instante antes de llamar a la puerta, se congeló en el aire al oír las palabras de la otra persona.
“Las cosas buenas no deben quedar en manos de extraños. Nuestra Se Se es tan buena chica, que no quiero que Fu Jun, ese caballero hipócrita, la ponga las manos encima. Además, ¿Se Se no le gusta mucho a tu abuelo? Casarse con una nuera que lo satisfaga solo te beneficiaría, ¿verdad? No es que te esté diciendo que te cases con ella de inmediato; solo comprométanse por unos años y luego puedes romper el compromiso cuando seas lo suficientemente mayor y creas que no es una pareja adecuada.” (Cen Li)
En cuanto la despreocupada voz Cen Li terminó de hablar, Jiang Se sintió una punzada en el pecho y su mano suspendida en el aire bajó lentamente.
Cen Li no se equivocaba, el viejo maestro Lu realmente la apreciaba.
Ella lo sabía mejor que Cen Li.
En este mundo, el afecto de nadie llega sin razón. Para que alguien como el viejo maestro Lu la tuviera en tan alta estima, solo Dios sabía exactamente cuánto esfuerzo le había costado a Jiang Se para que él la viera de una manera diferente.
Había necesitado tanto tiempo y esfuerzo, solo para poder estar más cerca de él.
A través de la estrecha rendija de la puerta entreabierta, el estudio se extendía hacia un mundo confinado y alargado. Los hombres dentro estaban de espaldas a la puerta, completamente inconscientes de que la chica de la que estaban hablando estaba justo afuera.
“Te estás volviendo cada vez es más ridículo. No tengo ningún interés en Jiang Se y por muy bien que hables de ella, a mis ojos no es nada especial*. Es demasiado…”
(N/T: *不过尔尔» (bùguò ěr ěr) en español significa «nada más, simplemente así.” o «no es más que eso.” Implica una cierta desaprobación o desprecio hacia algo o alguien que se considera ordinario, común o no destacable: nada especial.)
Cuando Lu Huaiyan dijo eso, sus dedos que jugueteaba con el encendedor se detuvieron un momento, como buscando las palabras adecuadas para describirla. Tras una larga pausa, finalmente dijo: “Insulsa y nada destacable.”
‘Nada especial.’
‘Insulsa y nada destacable.’
¿Así que es así como la veía?
La furiosa tormenta fuera de la casa impregnó lentamente sus huesos.
Se le helaron las manos y los pies, su corazón se desplomó, pero las comisuras de sus labios no pudieron evitar curvarse en una sonrisa en contra de su voluntad.
Jiang Se había tenido este temperamento desde que era una niña.
Cuanto más turbulentas eran las emociones que la embargaban, más serena se volvía su sonrisa.
En ese momento, la sonrisa en sus labios era probablemente la más cálida que había tenido en su vida.
“¡Ah’Yan!” – Dentro del estudio, la voz de Cen Li tenía un dejo de frustración, casi como si estuviera rechinando los dientes. – “¿Por qué tienes que decirlo con tanta dureza? Estás hablando de mi hermana; no olvides que cuando te ve, ella también te llama ‘hermano mayor.’”
“Es precisamente porque es tu hermana que te digo la verdad. Desprecias a Fu Jun y quieres usar la influencia de la familia Lu para romper el compromiso entre las dos familias, pero ¿qué te hace pensar que yo, Lu Huaiyan, estoy dispuesto a ser tu chivo expiatorio? ¿Por nuestra amistad? ¿O por el hecho de que tu hermana me llama ‘Hermano mayor Huaiyan’?”
Con un chasquido seco, Lu Huaiyan arrojó el encendedor sobre la mesita de noche y su voz era tan fría como el viento que aullaba en el frío mes de invierno. – “Con el debido respeto, tú y tu hermana tienen la cara tan grande*.”
(N/T: * Es una expresión coloquial que significa «tener mucha vergüenza» o «no tener vergüenza.»)
Cuando sus pensamientos quedaron expuestos, Cen Li era como un cañón que había sido tocado por el agua, cuyo fuego se apagó en un instante
Cen Li, sorprendido por el rotundo rechazo, guardó silencio al instante.
Un silencio sofocante se apoderó de la habitación; la tormenta del exterior se acercaba sigilosamente y los truenos retumbaron en el aire denso.
Al otro lado de la puerta, la chica alzó sus espesas pestañas y lanzó una mirada distante al cielo tormentoso. Un fugaz atisbo de disgusto brilló en las profundidades de sus ojos oscuros.
Ese día, la tormenta eléctrica era tan intolerable como siempre.
Jiang Se se dio la vuelta y retrocedió paso a paso.
Al igual que cuando llegó, sus pasos se mantuvieron firmes y silenciosos, sin hacer el más mínimo ruido y sin dejar rastro de su presencia.
***
Para cuando regresó a su habitación, alguien había entrado y ya no estaba vacía.
Ji Yunyi la esperaba en la habitación acompañada de varios diseñadores de moda, uno de los cuales sostenía un vestido en sus brazos.
En cuanto Jiang Se entró en la habitación, Ji Yunyi le hizo un gesto al diseñador para que se acercara y dijo: “El vestido ya está aquí, póntelo ahora. De ahora en adelante, no debes comer y trata de beber la menor cantidad de agua posible.”
Jiang Se observó el vestido de alta costura.
Era un vestido bustier*, con un clásico bordado floral oculto bajo las capas de la falda, y pequeños diamantes incrustados en el centro de las flores. Al caminar, era como si las estrellas del cielo se hubieran posado sobre las flores florecientes: complejo, solemne, pero con un toque soñador.
(N/T: *Un vestido bustier es un tipo de vestido que tiene la parte superior en forma de bustier, una prenda femenina ajustada que cubre desde el pecho hasta la cintura, sin mangas y generalmente sin tirantes. La parte superior del vestido bustier puede ser de varios estilos, como corsé, sujetador, o simplemente una prenda ajustada que realza el busto.)
Al elegir el color del vestido, Ji Yunyi había preferido un fondo blanco con diamantes negros, pero Jiang Se eligió el negro deliberadamente.
Simplemente porque a Lu Huaiyan le gustaba la ropa negra.
En ese momento, Jiang Se sintió tan deslumbrante y desagradable aquel color negro como la tinta.
“Cámbialo.” – Dijo en voz baja mientras caminaba hacia el probador.
Al verla así, Ji Yunyi supo que su naturaleza rebelde había resurgido de nuevo y la sonrisa en su rostro se desvaneció levemente.
Justo cuando estaba a punto de decir algo, vió a Jiang Se detenerse en seco.
“Olvídalo, me pondré este; no hace falta cambiarlo.” – Dijo Se Se en voz baja. – “Este es el vestido que elegí personalmente. ¿Por qué no ponérmelo?”
Sus palabras sonaron extrañas, más como un autocuestionamiento a sí misma que como si realmente formulara una pregunta.
Varios diseñadores bajaron la mirada, con la mirada fija en sus narices y sus narices fijas en sus corazones*.
(N/T: * «眼观鼻,鼻观心» (yǎn guān bí, bí guān xīn) es una expresión china que significa, literalmente, «ver el puente de la nariz, ver el corazón (a través) de la nariz.” Su significado se refiere a una situación donde una persona está extremadamente concentrada, con los ojos mirando hacia abajo, a menudo en señal de vergüenza, humildad o, en algunas ocasiones, como un signo de extrema concentración en uno mismo.)
Ji Yunyi pareció finalmente notar la inusual palidez en el rostro de Jiang Se. Observó a su hija con atención y pronto sus ojos se desviaron ligeramente hacia las demás personas en la sala.
“Pueden retirarse.” (Ji Yunyi)
Una vez que todos se fueron, Ji Yunyi tomó el vestido y ayudó a Jiang Se a ponérselo.
Madre e hija se pararon frente al espejo.
El vestido negro hacía que el reflejo de chica del espejo pareciera una camelia blanca floreciendo en la oscura noche: pura y noble y combinado con el rostro ahora pálido y casi blanco como la nieve, de Jiang Se, transmitía sutilmente una sensación de fragilidad.
“Se Se, ¿dónde está tu sonrisa?” (Ji Yunyi)
Al oír eso, las comisuras de los labios de Jiang Se se elevaron ligeramente, dibujando una sonrisa perfecta.
Solo entonces Ji Yunyi mostró una expresión de satisfacción. – “¿Acabas de salir del estudio?”
“Sí.”
Los ojos de Ji Yunyi de inmediato mostraron una clara comprensión, pero no le preguntó a Jiang Se a quién había ido a buscar al estudio, en cambio, le preguntó: “El brazalete de jade que te envió la familia Fu, ¿lo usarás tú o prefieres que te lo ponga yo?”
Era una pregunta con dos opciones, pero solo había una respuesta.
Ella debía usar ese brazalete esa noche.
Jiang Se bajó la mirada y observó el brazalete de jade en el tocador.
Era una jadeíta verde tipo cristal, translúcida y clara, de un color vibrante. Se decía que era una antigüedad que la familia Fu había comprado en una casa de subastas durante los primeros años de la República de China.
Enviar un brazalete así para celebrar la mayoría de edad de Jiang Se demostraba la sinceridad de la familia Fu.
Jiang Se sabía lo que significaba usar ese brazalete.
Y también sabía que tenía la responsabilidad de usarlo.
Levantó la vista y le preguntó a Ji Yunyi: “¿Le pediste a mi hermano que buscara a Lu Huaiyan?”
“Tu hermano no quiere que sacrifiquemos tu matrimonio por una cooperación. Me dijo que ya tienes a alguien que te gusta. Aunque no me dijo quién era.” – Ji Yunyi sonrió levemente. – “Pero Se Se, ¿cuántas veces has seguido a Ah’Li a casa de la familia Lu en los últimos dos años? Si no te gustara Lu Huaiyan, con tu temperamento, ¿cómo podrías haber ido con el viejo maestro Lu a ver la ópera de Pekín que nunca te ha gustado? La familia Lu es buena, pero ese joven de la familia Lu…”
Al darse cuenta de que sus palabras no eran apropiadas, Ji Yunyi se detuvo bruscamente, pasó junto a Jiang Se, le tomó la mano izquierda y deslizó con cuidado el brazalete de jade por su esbelta muñeca.
“Ahora que sabes que Lu Huaiyan no tiene ningún interés en ti, es hora de afrontar la realidad. Es más sabio rendirse con prudencia que aferrarse ciegamente a algo. Fu Jun es una buena opción, tanto para ti como para la familia Cen.” (Ji Yunyi)
(N/T: ¿Será que la madre lo planeó todo?)
Ji Yunyi presionó suavemente el hombro de Jiang Se, indicándole que se mirara al espejo.
“Se Se, no olvides que tu apellido es Cen.” (Ji Yunyi)
‘No olvides que tu apellido es Cen.’
Jiang Se miró fijamente los dos rostros completamente diferentes en el espejo y sus pensamientos se paralizaron momentáneamente por esas palabras.
No, eso no es cierto.
No se apellidaba Cen.
Ella es Jiang Se, ya no Cen Se, la preciosa hija de la familia Cen de Beicheng.
***
En la habitación, completamente oscura, las cortinas opacas estaban tan cerradas que no se filtraba ni un solo rayo de luz.
Jiang Se abrió los ojos en la oscuridad.
Sus pensamientos se aletargaron por unos segundos, pero pronto se dio cuenta de que había vuelto a soñar. Esta vez, era un sueño nostálgico: el del día de su ceremonia de mayoría de edad.
¿Cuánto tiempo había pasado desde la última vez que soñó consigo misma a los dieciocho años?
En aquel entonces, todavía era Cen Se, la joya preciada de la familia Cen.
Y en aquel entonces, Fu Jun aún no había muerto.
A través de las cortinas, no podía distinguir qué hora era afuera, así que se incorporó de la almohada y echó un vistazo a su teléfono en la mesita de noche.
Eran las 5:59, un minuto antes de que sonara la alarma que había programado.
Al poco tiempo, junto con el sonido de la alarma, apareció un recordatorio en su calendario:
[‘8:00 PM, Aeropuerto Internacional de Beicheng, recoger a Cen Yu.’]
Jiang Se apagó el teléfono.
En la oscuridad, dejó escapar lentamente un suspiro.
Cen Yu era el joven hermano menor de Jiang Se y la verdadera rama dorada y hoja de jade* de la familia Cen.
(N/T: 金枝玉葉» (Jīnzhīyùyè) significa literalmente «ramas doradas y hojas de jade.” En el contexto de la cultura china, este término se utiliza para describir a alguien de muy noble nacimiento, generalmente perteneciente a una familia real o de alto rango. También puede referirse a algo extremadamente valioso o precioso, como una persona o un objeto muy especial.)
Después de traer a Cen Yu de vuelta con la familia Cen, finalmente sus vidas, que habían estado desincronizadas durante veintitrés años, estaban a punto de volver a su cauce.
Nameless: Tenemos novela nueva y como verán es China. Así que la voy a avanzar lentamente porque la estoy traduciendo desde su idioma original (Chino). Me gustó la sinopsis, así que decidí traducirla, espero que pueda cumplir con mis expectativas y con las vuestras.
Por si no entendieron ella alguna vez se llamó Cen Se (Apodo: Se Se) y parece haber cambiado de apellido, por lo que ahora es Jiang Se. Al parecer en este primer capítulo ella ha estado recordando justo los acontecimientos cercanos a su cumpleaños 18.
Novelas | Menú | Siguiente |
Capítulo 5: ¿No has hecho ya suficiente alboroto? El lugar más iluminado de todo…
Capítulo 4: Tongcheng Tongcheng se encuentra al sur del río Yangtsé y era una…
Capítulo 3: Un Extraño El sedán negro entró lentamente en la Mansión Bei Yu…
Capítulo 2: Sin Tiempo A medida que se acercaba octubre, el cielo en Beicheng…
13. Niños de la noche ③ Contiene expresiones demoníacas y crueles. Hola, soy Yurushia.…
12. Niños de la noche ② En el momento en que los alrededores se…
Esta web usa cookies.